El CEO de Netflix, Ted Sarandos, ha declarado audazmente que el gigante de la transmisión está "salvando a Hollywood", enfatizando que el teatro es "una idea anticuada para la mayoría de las personas". Hablando en la cumbre de la época100, Sarandos desestimó las preocupaciones sobre el éxodo de la producción cinematográfica desde Los Ángeles, la ventana teatral reducida, la disminución de las experiencias del cine y los números de taquilla fluctuantes. Él cree firmemente que Netflix, siendo una empresa altamente centrada en el consumidor, lidera el cargo en la industria del entretenimiento. "No, estamos guardando Hollywood", declaró, subrayando el compromiso de Netflix de entregar contenido en la forma en que los consumidores prefieren verlo.
Al dirigirse a la recesión en las ventas de taquilla, Sarandos planteó una pregunta retórica a la audiencia: "¿Qué está tratando del consumidor que nos decía? Que les gustaría ver películas en casa". Si bien expresó una afición personal por la experiencia teatral, minimizó su relevancia general, afirmando: "Creo que es una idea anticipada, para la mayoría de las personas. No para todos". Esta perspectiva se alinea con el modelo de negocio de Netflix, que prioriza la transmisión sobre las visitas de cine tradicionales.
Los desafíos de Hollywood son bien conocidos, con películas como "Inside Out 2" y "A Minecraft Movie" que refuerza la industria, mientras que incluso los éxitos de taquilla de Marvel ahora muestran un rendimiento inconsistente. El cambio en la visualización de los hábitos se destaca aún más por los comentarios del actor Willem Dafoe, quien lamentó el cierre de los cines y el diferente tipo de atención que los televidentes brindan en casa. "Lo cual es trágico, porque el tipo de atención que la gente brinda en casa no es lo mismo", comentó Dafoe, expresando preocupación por el impacto en las películas más desafiantes y el aspecto social de las películas.
En contraste, el cineasta Steven Soderbergh sigue siendo optimista sobre el futuro de los cines, lo que sugiere que pueden coexistir con los servicios de transmisión. Hizo hincapié en el atractivo en curso de la experiencia cinematográfica y la importancia de involucrar al público más joven para garantizar la longevidad de los teatros. "Creo que la gente todavía quiere salir", señaló Soderbergh, destacando el encanto único de ver una película en un teatro y la necesidad de atraer al público mayor también. Él cree que el futuro del cine depende de una programación efectiva y compromiso de la audiencia en lugar del momento de los lanzamientos teatrales y caseros.